- No encender nunca el aparato mientras está vacío: Para evitar que se encienda accidentalmente antes de haber introducido los alimentos, tenga siempre dentro un vasito con agua, que a la vez servirá para que no se desquen demasiado las comidas.
- No introducir nunca en el microondas un objeto de metal, ni tampoco cacharros con adornos metálicos ni pintura dorada, pues las ondas no atraviesan el metal.
- Mantener siempre perfectamente límpias las paredes del microondas; de lo contrario, las partículas pegadas a ellas impedirán que pasen las ondas y perderá eficacia.
- Usar recicpientes adecuados para introducir el alimento al horno, que pueden ser de plástico resistente al calor, loza, porcelana o materiales específicos. Para calenta, también podemos utilizar vidrio o cristal.
- No use el microondas para cocinar huevos con cáscara. De hacerlo, debe perforar las cáscaras previamente para evitar que se estallen durante la cocción.
- Coloque el alimento siempre en el centro del horno. Si tiene varias partes, colócalas en forma de corona; de esta manera conseguirás que el calor se distribuya uniformemente.
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